Un ático duplex de ensueño en Casa Burés: el encanto del Eixample barcelonés
El sol comienza a teñir los tejados de Barcelona de un suave tono dorado y los rayos de luz se filtran a través de los lucernarios del ático dúplex en la cuarta planta de la Casa Burés. Este majestuoso edificio modernista, completamente rehabilitado, es el hogar de una joya singular. Un dúplex de 221 m² que se encuentra en lo más alto de la finca, logrando recuperar las antiguas azoteas del edificio. Una propiedad que es el sueño hecho realidad de aquellos que buscan algo exclusivo y único.
Interiorismo moderno y acogedor en Casa Burés: un oasis en la ciudad
La primera planta del dúplex se divide en una zona de día, con una amplia cocina abierta al salón-comedor que se orienta hacia el sureste, y una zona de noche que consta de dos dormitorios y dos baños, uno de ellos en la máster suite. Lo que hace de este segundo dormitorio algo singular es su forma circular y su ubicación en la parte superior de una de las torres del edificio. Unas bonitas escaleras conducen a la majestuosa zona de trabajo, que forma parte de la segunda planta del dúplex. Desde allí, las vistas son espectaculares y permiten disfrutar cómodamente del sol y de los terrados típicos del “Eixample” barcelonés.
La rehabilitación de Casa Burés: el rescate de un patrimonio invaluable
El diseño arquitectónico de la Casa Burés se ha cuidado al máximo, manteniendo los elementos más destacados del edificio y dotándolo de originalidad y luminosidad gracias a los lucernarios. El interiorismo de la propiedad también está cuidado al detalle, con tonos neutros y líneas suaves inspiradas en la naturaleza. Todo ello crea un ambiente acogedor y sofisticado.
Amplias zonas comunes en Casa Burés: un estilo de vida exclusivo
Pero no solo la propiedad es exclusiva, las zonas comunes de la Casa Burés también lo son. La planta baja está compuesta por dos áreas comunes, una piscina cubierta, un gimnasio, una bodega, un “home cinema”, un área de trabajo y una cocina profesional con comedor, ideal para celebraciones con grandes grupos de amigos. La terraza superior ofrece una piscina al aire libre y espectaculares vistas de la ciudad de Barcelona. Además, cada propiedad tiene su propio trastero, incluido en el precio.
El diseño arquitectónico de Casa Burés: la singularidad de un toque de historia
La historia de la Casa Burés es fascinante. Fue construida entre 1900 y 1905 por Francesc Burés, propietario de una de las empresas textiles más importantes de la España de finales del siglo XIX. La finca estaba destinada a albergar la sede de su empresa en la planta baja, la residencia familiar de 1000 m² en la planta principal y 12 viviendas de alquiler de 300 m² cada una. Uno de los primeros ascensores de la ciudad se instaló en el edificio para facilitar el acceso a las plantas superiores.