Situada en una zona muy tranquila y residencial en el pequeño municipio de Premia de Dalt, a tan sólo media hora de la ciudad de Barcelona y con la playa del Maresme a menos de dos kilómetros.
Una casa con interiores amplios y luminosos de estilo moderno y cómoda, con jardín y piscina. Con un exterior de estilo clásico con ventanas cuadradas y una entrada enmarcada por dos columnas. Así como la parte trasera de la casa con una terraza que precede al jardín bajo un balcón sostenido por columnas.
Cuenta con jardín al frente y detrás de la casa así como por uno de sus laterales, empleando el otro lateral como acceso al aparcamiento cerrado en el sótano de la casa, dedicado exclusivamente al aparcamiento, en el que caben de tres a cuatro coches.
Toda la casa suma los 500 metros cuadrados construidos en una parcela de casi 1300 metros cuadrados. La construcción es muy reciente, de hace diez años, por lo que se encuentra en perfecto estado.
Al entrar en la planta baja, se nos da paso a un amplio recibidor abierto al salón comedor y el que comunica también con un baño completo. Todo el salón está orientado hacia el sureste por lo que disfruta de abundante luz durante toda la mañana y parte de la tarde. Los grandes ventanales del salón comunican con la terraza y el jardín donde se encuentra la piscina. La cocina es amplia y luminosa, con acceso también a la terraza y con una zona cerrada para la lavandería y despensa. En la planta baja se encuentra también un dormitorio, dedicado actualmente como zona de ocio y estudio.
La primera planta es la dedicada a los dormitorios, todos ellos alrededor de un amplio distribuidor. En esta planta cuenta con cuatro dormitorios y tres baños. El dormitorio principal dispone de su propio vestidor, además de disfrutar de vistas al mar. Todos los dormitorios así como los baños son muy amplios y luminosos.
En la última planta de la casa se encuentra una amplia buhardilla que aprovecha la pendiente de los techos. Una zona abierta empleada como salón multimedia y como estudio, con vistas al mar a través de uno de los ventanales. Esta buhardilla esconde también un pequeño trastero.