Situada en un lugar excepcional, con vistas frontales al mar y hacia la playa. La parcela ocupa más de dos hectáreas y media de terreno sobre la montaña en primera línea de Lloret de Mar. Muy cerca del histórico Castillo de San Juan, desde donde se vigilaba la costa en tiempos remotos, gracias a la altura que ofrece la montaña quedando por encima de todo lo que hay alrededor.
Tan sólo se separa del agua por el camino de Ronda que transcurre en el límite inferior de la propiedad, y protegido por un muro que rodea la casa. Desde el interior de la parcela, subiendo por caminos y senderos que se abren por los jardines de la propiedad, se llega a lo alto de la montaña donde se encuentra la gran casa. Construida a principio de los años 60 fue de las primeras construcciones en adueñarse del excepcional paisaje y descubridora del potencial de la zona, siendo en aquel entonces la Costa Brava un paraje únicamente para pescadores y aún por descubrirse para el turismo vacacional.
La casa cuenta con una superficie construida de más de mil quinientos metros cuadrados donde se incluye la vivienda principal, las terrazas y varias zonas de uso deportivo. Además del garaje para varios vehículos, pista de tenis, minigolf, piscina, sauna, bodega, pista de bolos exterior y gimnasio. La propiedad está pensada para ofrecer exclusividad y privacidad en su interior. Como si fuera un resort privado dispone de todas las comodidades en su interior.
Pese a la fecha que marca su construcción, nadie acertaría a decir los años que lleva en pie. Ya que tanto exteriormente como su interior están excelentemente conservados. Sus acabados interiores de baldosas en sus suelos encajan a la perfección con el aire histórico y Mediterráneo que se respira en la finca.
Orientada al sur y con todos los dormitorios mirando hacia el mar, el interior de la casa aprovecha la luz del día y las vistas despejadas en todos los rincones de la casa. Su piscina de agua salada y con temperatura controlada está rodeada de jardín, y logra confundirse desde su interior con el mar eterno que se ve frente a la casa.
A tan sólo una hora de Barcelona, y muy bien comunicada tanto con el Aeropuerto de Girona como con el Aeropuerto de Barcelona. Perfecta para residir todo el año o en vacaciones.
Una de las opciones que presenta la casa es dividir la parcela para ubicar allí 5 casas más, y hacer un complejo de viviendas en un lugar increíble y sin igual.